Entrevista a Tamara Chubarovsky donde explica los beneficios de contar cuentos, la importancia de la oralidad y de la conexión directa con los niñ@s. Realizada por Gabriel Alganda y publicada en el periódico Tribuna de Talavera de la Reina. www.alganda.org
– ¿Cómo nace la idea de trabajar haciendo talleres de cuentacuentos, como nace tu profesión?
Ya con trece años comencé a animar fiestas infantiles y contar cuentos con títeres en los veranos con una amiga. Después de mis estudios en Alemania, quince años más tarde, retomé esta actividad contando cuentos con títeres en escuelas y bibliotecas de Madrid y con mis grupos de teatro infantil, que mantuve durante diez años. Posteriormente, cuando tuve la escuela infantil Waldorf en Villanueva de la Vera, introduje todas estas actividades dentro de la jornada escolar. Es sobre todo a partir de la publicación del libro “Cuentos para ver, oír y sentir”, que recoge toda esta experiencia, que empiezo a ofrecer talleres y luego el Curso online de El cuento como herramienta pedagógica, donde enseño mi metodología.
-¿Por qué debemos defender los cuentos, qué ganamos emocionalmente y en el desarrollo del niño?
Los niños adoran que se les cuente un cuento. Es un mimo muy especial que no se compara ni suplanta con películas o audios. Que les leamos un cuento les gusta, pero si se los contamos manteniendo el contacto visual, afectivo y espontáneo, resulta un verdadero regalo para el alma infantil.
A través de los cuentos podemos transmitir valores de forma lúdica y creativa. Especialmente los cuentos clásicos y populares nos ofrecen una guía de superación de obstáculos y conflictos, nos hablan de valor, compasión, perseverancia, paciencia y tantos otros valores fundamentales para la vida social y personal. Y dado que enseñan de manera indirecta a través de sus imágenes, calan más hondamente que cualquier discurso moral. Los cuentos pueden ser una inspiración para momentos posteriores de la vida y en el momento de escucharlos, si están unidos al afecto y la atención de un adulto dedicado, se transforman en bálsamo relajante y reparador. ¡Qué diferente es acostarse habiendo escuchado un cuento antes!
Además de las emocionales, trabajamos habilidades tan necesarias para el aprendizaje como son la atención, la escucha, la memoria, la imaginación y la capacidad de expresión.
Einstein decía, “Si quieres que tu hijo sea inteligente, cuéntale cuentos. Si quieres que sea más inteligente aún, cuéntale más cuentos”.
– ¿Que ofrece un CuentaCuentos en el desarrollo infantil?¿Cómo puede ayudarlo positivamente?
Hoy día resulta cada vez más difícil que los niños escuchen un cuento, «a pelo» y que a partir de nuestra voz sean capaces de recrear interiormente las imágenes de lo que están escuchando. Por eso es tan importante aprender a contar un cuento de manera atractiva. A través de un cuentacuentos el niño se va entrenando en esta capacidad de imaginarse interiormente, enriqueciendo su vida anímica. Además, esta capacidad le llevará también a interesarse por la lectura, siendo capaz de imaginarse interiormente y por tanto de vivenciar lo que lee. A su vez esto tendrá gran repercusión en su aprendizaje.
– Un cuento o un vídeo. ¿Qué es mejor, y que piensas que es mejor para los pequeños?
Sin duda alguna, un cuento. Las imágenes provenientes de vídeos (de PC, TV, tablet, etc) ofrecen una imagen perfecta y terminada. A mayor perfección y velocidad de la imagen externa, menor capacidad de creación y movilidad de las imágenes interiores. Todo viene de fuera y los niños se tornan cada vez más pasivos y consumidores de imágenes. Debemos ayudar a los niños a recuperar esa capacidad e interés por moverse interiormente, a ser capaces de crear sus propias imágenes y representaciones internas.
– ¿Un libro o un cuento, qué nos recomiendas?
En niños menores de 6 años, el cuento es fundamental. Además, por supuesto los niños gustan de libros con bonitas imágenes, pero nunca deberíamos renunciar al relato narrado a voz viva por un adulto, que transmite afectividad y cercanía.
– ¿Qué necesitamos para hacer Cuentacuentos con nuestros hijos e hijas?
En el libro antes mencionado y en los talleres doy lo que considero las principales herramientas para que cualquiera pueda ser cuentacuentos:
- Buenas adaptaciones de cuentos para los más pequeños
- Nociones básicas artísticas sobre el uso de la voz, la dinámica al contar cuentos.
- Trucos y recursos como rimas y canciones para preparar el ambiente antes de contar el cuento. Es decir, actividades que facilitaran la posterior escucha.
- Técnica de los títeres de mesa, que facilita al niño a escuchar el cuento y que ayuda al adulto a entrenarse en la práctica narrativa adquiriendo buenos hábitos de pausas etc.
- Pero ante todo, lo que necesitamos y también procuro transmitir, es la conciencia del gran bien que hacemos a nuestros niños contándoles cuentos, un bien que repercute en su desarrollo emocional, cognitivo y hasta físico.
– También hacen ustedes teatro. ¿Cómo podemos ayudarnos del teatro para poder ayudar a nuestros hijos e hijas, como poder ayudarles a crecer?
El cuento transformado en juego, permite a los niños vivir y sentir el cuento. Pero ante todo, la diferencia entre escuchar un cuento y actuarlo con otros niños son las posibilidades de desarrollo de capacidades sociales. En el teatro ejercitamos aspectos como la cooperación, trabajo en equipo, paciencia, empatía. Además estos cuentos y dinámicas teatrales facilitan al niño el estar centrado, calmo y a la vez despierto, desarrollando capacidades como la atención, escucha, adquisición de vocabulario, expresividad, creatividad e imaginación. Podemos también aprovechar el contexto imaginativo del cuento para hacer actividades que apoyarán enormemente la integración sensorial y superación de reflejos primitivos. De manera muy completa podemos promover el desarrollo emocional, cognitivo y físico del niño, contribuyendo a su desarrollo integral.
Estos cuentos con teatro son ideales para hacer con niños desde los tres o cuatro años y con cualquier niño que presente déficit de atención, hiperactividad, problemas de lenguaje, de comportamiento o cualquier problema de desarrollo.
– ¿Desarrollas tu los cuentos y materiales que ofreces?¿Como desarrollas ese material?
Mi material surgió en la práctica misma, de manera espontánea en la interacción con los niños o preparando actividades para un grupo o un niño concreto. En el caso de las rimas con movimiento se trata de creaciones propias en el 90% de los casos. Los cuentos son en su mayoría populares. Mi labor ha sido adaptarlos para facilitar su versión de teatro, títeres o narración dinámica. Les puse ritmo, rima, retahílas, rimas y canciones, además de sugerir actividades complementarias para cada cuento.
En el curso on-line El cuento como herramienta pedagógica puedes aprender mucho más sobre este tema.