Muchas veces personas me preguntan sobre esta variante Waldorf de la Pedagogía Terapéutica. Yo misma la estudié y su base impregna profundamente todo mi trabajo corporal a través de la Rimas con movimiento®.
De ahí mi gran gratitud y respecto hacia la Pedagogía de Apoyo y el gusto de que la conozcas…
¿Qué es la Pedagogía de Apoyo Waldorf?
“Los niños ahora son diferentes, tenemos que educarlos de forma diferente, con cada niño la educación tendrá que ser una sanación.”
Estas son palabras que pronunció Rudolf Steiner en 1919 a los primeros maestros/as Waldorf.
Hoy en día podemos decir que esto es aún más actual. En las escuelas de todo el mundo los maestros y maestras se están enfrentando al problema de que ya no pueden esperar como facultades naturales en los niños y niñas las capacidades para aprender a escribir, leer y calcular. El número de alumnado por clase que carece de estas habilidades básicas, de las cuales depende el aprendizaje, está aumentando de forma alarmante.
Cada vez hay más niños/as que llegan a la edad escolar necesitando atención especial para poder desarrollar sus capacidades y adquirir conocimientos y habilidades. No presentan déficit neuronal, ni patologías clínicas o retraso mental, que puedan ser encuadrados en un Programa de Integración, sino que tienen una inteligencia normal o superior a la normal pero que son considerados niños especialmente difíciles. Se da en éstos una situación de trastorno del desarrollo evolutivo. Por diversas razones, no consiguen superar procesos característicos de las distintas etapas evolutivas de los siete primero años de vida, transformándose en la edad escolar en dificultades para el aprendizaje. En algunas funciones estos niños que tienen el desarrollo desequilibrado, están a la altura de las expectativas correspondientes a su edad, pero en otras están por debajo de ellas, presentando problemas de aprendizaje, comportamiento y actitud social (hiperactividad, déficit de atención, disfunciones sensoriales, dislexias, discalculias, falta de ubicación espacio-temporal, etc)
Que los niños sean hoy distintos y que necesiten otras formas de apoyo en la enseñanza es un signo de nuestro tiempo. No podemos sólo incriminar al medio socio-cultural, a la familia, la crisis de valores…
Los niños actuales con dificultades, nos exigen un cambio interior desde el interés, la veracidad absoluta y el amor incondicional. Cada niño exige una respuesta diferente. Las personas implicadas en la educación y desarrollo del niño, deben bajo este enfoque aunar sus fuerzas, creando un círculo de apoyo que abarque todos los ámbitos del niño. El maestro tutor, el médico escolar, el maestro de apoyo y otros terapeutas trabajando en estrecha relación aportando al niño el apoyo que necesita para superar sus dificultades.
Con la base antroposófica del conocimiento del hombre, la Pedagogía de Apoyo Waldorf ha elaborado, reunido y sistematizado formas de intervención para estos niños, ayudándoles a superar los bloqueos que provocan su fracaso escolar, y que derivan en muchos casos en fracaso social y vital.
Esta Pedagogía de Apoyo se basa en gran medida en el trabajo desarrollado por la maestra Waldorf inglesa Audrey McAllen, que a partir de los años 50, observando las dificultades de los alumnos, empezó a desarrollar un sistema de actuación que ayudase a los niños a reconectarse adecuadamente con las habilidades motoras, para poder superar sus dificultades de aprendizaje. En 1974 publicó The Extra Lesson (La Clase Extra) donde recoge su investigación y desarrolla una metodología basada en ejercicios de movimiento, dibujo y pintura.
La pedagogía de Apoyo Waldorf plantea que detrás de las dificultades de aprendizaje subyacen procesos no superados en algunas de las etapas evolutivas del niño, desde el nacimiento hasta los siete años.
Un desarrollo equilibrado permite al niño adquirir: una correcta orientación espacial exterior e interior, la adquisición del esquema corporal, una lateralidad correctamente definida, un buen desarrollo de los sentidos del tacto, equilibrio y movimiento propio, una correcta integración del sistema corporal y la superación de los reflejos. Todos estos aspectos tienen una relación muy estrecha con las capacidades necesarias para aprender a leer, escribir y calcular, y por tanto es necesario prestar mucha atención a la situación en que se encuentra el niño respecto a los mismos.
A través de una observación minuciosa del niño con dificultades en el aprendizaje, el especialista de pedagogía de apoyo realiza una evaluación para detectar cuáles son las posibles causas de dichas dificultades y buscar los ejercicios que le ayuden a superarlas. La puesta en práctica del plan de trabajo suele ser individual aunque muchos de los ejercicios pueden ser realizados colectivamente en el aula con el profesor tutor ya que son beneficiosos para todos los alumnos.
Este texto está sacado de la web oficial en España, donde yo me formé y donde podrás encontrar la oferta de cursos en Madrid y Barcelona: http://apoyowaldorf.wordpress.com/la-pedagogia-de-apoyo-waldorf/